Desde bebés chicos y chicas van siendo orientados hacia bandos distintos, distinta ropa, distintos juguetes, distintos juegos ... distinta preparación para la vida y distintas expectativas de futuro.
Como madre de dos chicas, siempre he luchado para que esto no sea así y para que mis hijas eligieran cómo querían vestirse, a qué y con quién querían jugar y que no tuvieran límites a la hora de imaginar a qué querían dedicarse de mayores.
Esta forma de educar que hemos elegido en mi casa contrasta profundamente con la de las familias del instituto donde trabajo. En las conclusiones del diagnóstico de igualdad que realizamos el curso pasado destacábamos que el número de chicas que eligen el itinerario científico-tecnológico es bastante menor que el número de chicos ( 4 chicas/ 12 chicos en 1 de Bachillerato de ciencias) y en la FP que se imparte en mi centro (Familia Informática) la presencia de chicas es anecdótica, incluyendo ciclos en los que no hay ninguna o hay una que a mitad de curso abandona.
Por otra parte en 1 y 2 de ESO muchos de los problemas de convivencia se deben al absentismo o a la falta de motivación de las chicas gitanas. A mi centro está adscrito un colegio al que acude mayoritariamente población gitana. En el instituto se mezclan con el alumnado que procede de otros centros y barrios y trabajamos para su integración, pero ellas siguen fieles a "su cultura". Estas chicas no ven horizonte más allá de casarse lo más pronto posible y ni se les pasa por la cabeza que pueden estudiar y ser lo que ellas quieran ser.
Sólo muy pocas acaban bachillerato y van a la universidad. Son las que desde pequeñas han sido educadas por sus familias "como los payos".
Creo que es fundamental un trabajo conjunto de las familias y de los centros educativos para abrir horizontes. En este sentido en mi centro realizamos a lo largo del curso distintas actividades de motivación y animación al estudio con la colaboración del Secretariado Gitano, Almería Acoge y la Liga Española de la Educación. Cada chica que completa sus estudios de secundaria es para nosotras un motivo de satisfacción. Cada una que consigue un título universitario es un gran triunfo.